Salva tus dientes y alivia el dolor con nuestro servicio de endodoncia

Elimina la infección y el dolor sin perder tu diente. Nuestro tratamiento de endodoncia es rápido, seguro y efectivo.

Signos de que necesita una endodoncia

Dolor intenso al masticar

Sensibilidad prolongada al frío o al calor

Hinchazón en las encías

Cambio de color en el diente afectado

Beneficios de la Endodoncia

Salva tu diente natural y evita extracciones

Alivia el dolor de forma rápida y definitiva

Previene infecciones que pueden afectar otros dientes

Procedimiento seguro y sin molestias, con anestesia avanzada

¿Dolor o molestias en tus dientes?

¡No esperes más! Nuestro equipo de especialistas en endodoncia te ayudará a recuperar la salud de tu diente.

Preguntas Frecuentes

¿Qué es la Endodoncia?

La endodoncia, también conocida como tratamiento de conducto, es un procedimiento dental que se realiza para salvar un diente que está dañado o infectado. Consiste en eliminar el tejido pulpar (nervio y vasos sanguíneos) del interior del diente, limpiar y desinfectar el conducto radicular, y luego sellarlo para prevenir futuras infecciones.

El costo de una endodoncia varía dependiendo de la complejidad del caso y del consultorio dental. Lo mejor es solicitar un presupuesto personalizado para conocer el costo exacto de tu tratamiento.

La duración de una endodoncia varía dependiendo de la complejidad del caso. En la mayoría de los casos, se puede completar en una o dos citas.

No, generalmente la endodoncia no duele. Se realiza con anestesia local para adormecer el diente y la zona circundante, por lo que no sentirás ninguna molestia durante el procedimiento. Después de la endodoncia, es posible que sientas algunas molestias leves durante unos días, pero esto se puede controlar con analgésicos.

Después de una endodoncia, es importante seguir las recomendaciones de tu dentista. Generalmente, se recomienda evitar masticar alimentos duros o pegajosos con el diente tratado hasta que se haya restaurado completamente. También es fundamental mantener una buena higiene bucal, cepillando los dientes al menos dos veces al día y usando hilo dental diariamente.